viernes, 9 de enero de 2015

La felicidad de Elisa en Bayamo


El campo de las observaciones  de la naturaleza humana es muy amplio, complejo y guarda descubrimientos tan interesantes como instructivos.
Un buen testimonio de lo que te digo puede  significar lo que sucedió este 9 de enero en la redacción del periódico La Demajagua, en la provincia de Granma. Sin  exigir grandes placeres, Elisa Aguilar Corrales, Puchita, como la conocemos colegas y allegados satisfizo su sensibilidad, prácticamente sin proponerse celebrar este  cumpleaños con sus compañeros de la editora.
Además del convite que se armó en menos de dos horas de esta mañana y desearle felicidades en español e inglés, Zeide Balada le cantó en italiano, Gisel García lo hizo en coreano, Ibrahín Sánchez prefirió un idioma que ni él mismo conoce, en una jornada que Puchita calificó como maravillosa y yo lo suscribo.
Calle Siete quiso dejarlo en su memoria histórica, porque este homenaje sencillo en Bayamo, pero rebosado de amor, nos enseña una gran moraleja: la felicidad se encuentra en la humildad y en la sencillez.